
La estrategia electoral de los que en la sombra dirigen realmente a los genoveses originales y genuinos se está viendo enredada con las polémicas que ellos mismos provocan. La denuncia sobre el uso de los Falcon por parte de ZP lleva camino de acabar volviéndose contra estos estrategas del vale todo.
Hoy ha tocado turno a la protección de La Cosa en su condición de ex Presidente del Gobierno. Para comenzar hemos conocido que el Ministerio del Interior dedica más de 50 personas entre policías nacionales y guardias civiles para su protección estática y la móvil. A estos medios humanos hay que añadir los vehículos asignados mas los gastos generados en su vivienda habitual ( cristales blindados, garita, cámaras de seguridad, etc ).
como era previsible, nada más conocerse la noticia los genoveses han saltado como hienas. Se rasgan sus trajes y vestidos e incluso el afectado ha sacado un comunicado manifestando su indignación por salir a la luz publica esa información. Vayamos al grano.
En primer lugar, el dato se conoce como consecuencia de sus propias iniciativas sobre los gastos que generan el actual Presidente ZP.
En segundo lugar, La Cosa ha optado por acumular dinero contante y sonante. Es legitimo , pero tiene sus consecuencias. Por ejemplo se exhibe sin pudor por un puñado de dolares por todas las esquinas de la red de El Corte Inglés. Tiene que cumplir el contrato millonario firmado con sus editorial de cabecera. No es ningún secreto que su acreditada obsesión por el dinero obliga a reforzar su seguridad
En tercer lugar, es conocida su afición por viajar a lo largo y ancho del planeta en busca de una conferencia remunerada con cheque a su sociedad familiar Fazmatella. Tiene como norma no comunicar a la embajadas españolas su presencia y mucho menos alojarse en las residencias de los embajadores. Prefiere hoteles de 5 estrellas que acaba abonando el contribuyente.
En cuarto lugar y conectado con ese afán recaudatorio con fines estrictamente personales, se desplaza a ejercer de comisionista e intermediario a los lugares más sorprendentes del globo terráqueo. Desde Buenos Aires a Moscú pasando por Bogotá.

Asistentes a la boda de la hija de La Cosa
En cuarto lugar estamos hablando del mismo personaje que endosó a esos mismos contribuyentes sin mover una ceja los miles de euros que costó la boda privada de su hija, seguridad y transportes incluidos. Lo del convite mejor preguntárselo a Correa y asociados.
En quinto lugar estamos hablando del mismo personaje que nunca aclaró quien abonaba el sueldo a su preparador físico personal. el mismo que nunca explicó sus veraneos privados y los costes y beneficios que supusieron esos descansos estivales. Es el mismo que no tuvo reparos de utilizar a diplomáticos de carrera para acompañar a las novias de su hijo a pases de modelos. Es el mismo que aceptó todo tipo de regalos que no fueron inventariados por Patrimonio Nacional. Es el mismo que ahora se indigna porque hoy el contribuyente puede reflexionar sobre cuanto le cuesta que La Cosa haya decidido ganar dinero.
Lo dicho, los estrategas genoveses se han empeñado en lanzarse piedras a sus propios tejados. Y luego van y se indignan.