Oreja y Aguirre se bañan en su propio fango

Cuando La Cosa de nombre Aznar en septiembre de 1997 sostenía que “ Se ha demostrado que nosotros hemos ganado las elecciones cuando no teníamos a nadie a nuestra derecha” sabía bien de lo que estaba hablando. El mismo, sin ir más lejos, como luego el tiempo ha acreditado, aunque lo disimulaba , estaba ya a la derecha de su derecha.

Catorce años después hay que reconocer que su afirmación sigue en plena vigencia. De hecho, Mariano lo sabe , calla y por lo bajini alienta el voto de esa extrema derecha a la que tanto necesita electoralmente. Un día es la inmigración y los perversos inmigrantes , otro día son los ociosos parados que no quieren trabajar y siempre el terrorismo como arma arrojadiza contra todo aquel que tenga como objetivo acabar con la banda terrorista ETA.

Hoy el talibán de sacristía Jaime Mayor Oreja y la Condesa Esperanza Aguirre , la pareja de malvados profesionales que además cobran por ello, se han vuelto a bañar en sus propios fangos y miserias  y han hecho ciertas las palabras de La Cosa.

Ambos son unos genoveses especialmente retorcidos y que son lo que parecen que son. El primero un meapilas recalcitrante que ha hecho de la existencia de ETA su única razón de ser y que sabe además que la derrota de ETA es también su propia derrota.La otra es una ultra derechista de puro diseño que no por auto denominarse liberal y ser más chabacana que la media de los que la rodean deja de ser lo que es. Al igual que su colega de fango está enferma en su obsesión por derrotar a los socialistas por el procedimiento que sea.

Hoy Mayor Oreja en un ataque de nervios ha vuelto a relacionar al Gobierno con ETA para textualmente afirmar que:  “El Gobierno le ha dado a ETA legitimación y legalidad después de sus asesinatos. Ya nos gustaría que Zapatero usara la misma vara de medir que usa con el asesino terrible de Noruega, que hay que condenar sin duda; con otra vara está legitimando a 900 asesinatos que se han producido a lo largo de estos años”

Mientras tanto la Sra. Condesa que tiene su propia finca infecta por la corrupción institucionalizada por los imputados de  la trama Gurtel aún tiene el desparpajo de  auto preguntarse en voz alta:  “¿Cómo se puede comparar un llamado cohecho impropio, que es que me regalen a mí estas pulseras o que regalen lo que sea a cambio de nada simplemente por el cargo que se ocupa con la, a mi juicio, alta traición que supone que unos policías a las órdenes del ministro de Interior les diga a unos terroristas que salgan corriendo porque va a venir la policía a detenerles?”.

Ambos tras expulsar una parte del veneno que llevan dentro se han ido a descansar para recuperar energías y así poder seguir dando sentido a lo que Aznar con razón pronunció hace ya 14 años.