El meritorio genovés recibiendo los aplausos de sus amos
El Defensor del Menor de la Condesa Aguirre, un tal Arturo Canelda González continua haciendo méritos para ganarse el cielo a costa de los contribuyentes terráqueos. Y en esta ocasión no se le ha ocurrido nada mejor que para sumar puntos celestiales aprovechando que está Benedicto XVI por la finca de su ama y señora abrir una investigación confesional contra aquellos herejes que supuestamente han agredido verbalmente a los peregrinos que pululan por las calles madrileñas.
Para los más sorprendidos por las maneras de actuar de este ultra católico con un pasado manifiestamente sospechoso os recomiendo darse una vuelta por el post que hace algo más de un año se publicó en este blog. En cualquier país de la vieja Europa un tipo con ese curriculum estaría vendiendo estampitas de la Virgen de la Paloma y poco más.
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