domingo, 9 de octubre de 2011

42 dias y 42 noches : ¡ A por ellos, oé !

Genoveses autoaplaudiendose

Cuentan los cronistas, incluidos los de pago que los genoveses originales y genuinos están eufóricos. Les sobran las elecciones y, total,  con un notario amigo que validara las encuestas que se van conociendo serían más que suficientes para que Mariano, por fin, a la tercera fuera la vencida.

En Málaga, sin complejos ni recato han dejado claro, sin disimulos, que esto de los programas electorales son cosa del pasado. Se han repartido los Ministerios entre apostadores profesionales muchos de ellos con mando a distancia y a varios cientos de km del Palacio de Congresos.Se han encargado trajes para la ocasión y como el que invierte en bolsa, han hecho sus cuentas calculando los beneficios que le reportará vender la gestión de los servicios públicos más rentables.

Mariano a su manera también está eufórico y está convencido que los que como el han nacido  para ser Notarios, Registradores o Jueces, están igualmente capacitados para ser Presidentes del Gobierno. Es una mera cuestión genética. La diferencia, de existir, estaría en el número de temas a memorizar.

Mariano hace años que piensa, aunque no lo dice, que ser Presidente no debería depender del voto individual de los ciudadanos , incluidos los envidiosos igualitarios que tanto rencor acumulan. En Málaga no ha podido evitar interpretar la historia de manera cicatera. Su memoria acaba y comienza en lo que le enseñaron sus mayores. Suárez y Aznar son sus referentes y el resto unos impostores que se saltaron el temario.

Por su parte, los igualitarios siguen en sus cosas y con su programación programada. Han cerrado sus candidaturas electorales incluyendo a un mayor número de mujeres en sus cabeceras. Su candidato continua explicando, sin gritos ni insultos, sus propuestas como por ejemplo, una persona,un puesto. Mientras tanto, el Gobierno de ZP poco a poco, sin excesivo ruido, va desapareciendo de la escena política y tanto unos como otros en su ortodoxia y en una excesiva buena fe siguen convencidos que de lo que se trata no es otra cosa que respetar las reglas no escritas que se suponen comporta la celebración de unas elecciones generales.

Y sin embargo, entre la euforia de los genoveses y la programación programada de los igualitarios, se está abriendo hueco una corriente de opinión formado por legiones de resignados que ven en directo como está calando la idea que las elecciones son lo que los genoveses quieran que sean. Es decir, un tramite administrativo por el que hay que pasar pero que no determina el resultado final que no puede ser otro que la victoria genovesa por goleada.

Se consumen encuestas a diario. Algunas ni siquiera se hacen. Todas vaticinan la derrota de los igualitarios y la entrada triunfal de Mariano en Madrid una vez cautivos y derrotados aquellos que el 14-M del 2004 le robaron su merecida plaza para ejercer como Presidente del Gobierno.

Desde entonces Mariano ni perdona ni olvida y los suyos tampoco : "¡ A por ellos, oé ! ¡ A por ellos, oé !"

1 comentario:

BRUNO6 dijo...

Exilio antes que deportación,¿no?.