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Toti

A trancas y barrancas, y a pesar de los esfuerzos retribuidos que hace el trilero de Trillo para que nos olvidemos de las relaciones entre los genoveses y los  gurtelianos, el hecho cierto es que los diferentes sumarios abiertos siguen su curso.

Uno de ello afecta a un tal Toti, ex Presidente de las Cortes de Castilla y León y ex Consejero de Fomento del virtual gobierno regional en esa CA . Resulta que este genovés de apodo circense ya está inculpado por el TSJCL, lo  que dicho en términos no judiciales es que o encuentra una razonada y razonable explicación de las adjudicaciones que en su etapa hizo a TECONSA o lleva camino de hacer compañía a Don Vito y asociados

Otro sumario, el de los trajes de gorra a Camps y Costa, continúa también adelante a pesar de que el piadoso intenta, vía Trillo, que su caso vaya al Tribunal Supremo.Mientras tanto y sin que nadie sepa muy bien si también se ha ido de gratis , Camps se ha pasado un fin de semana en las carreras de GP de Japón de motociclismo. Ahora ya solo falta saber quien ha sido el paganini de ese viaje que a la vista de como no se las gasta el piadoso cabe suponer que ha habido un intermediario que se ha hecho cargo. ¿ BANKIA por ejemplo ?.

El tercer sumario sobre la financiación irregular de las cuentas genovesas ha tenido su minuto de gloria cuando con desgana algunos parlamentarios han podido acceder de prisa y corriendo a los contratos que la Generalitad Valenciana adjudicó digitalmente al Bigotes que a su vez tenía montado un chiringuito con determinados empresarios genoveses que desinteresadamente soltaban miles de euros que retornaban via adjudicaciones. Círculos viciosos que diría Sabina

Y por último, la trama madrileña. Aquí el juez Pedreira , aunque lleva a sus colegas del TSJCM subidos a su hombro. sigue tomado declaraciones y recibiendo informes de la UDEF y de la Agencia Tributaria. De momento todo se va confirmando: Don Vito compró al por mayor y al por menor y en cómodos plazos a todo tipo de cargos electos genoveses, incluidos los que solo una vez que dejaron de recibir sus emulentos gurtelianos pusieron bajo la pista a la policía.