viernes, 13 de julio de 2012

El honor de los Fabra : ¡ Que se jodán !

El Clan Fabra al completo
De Andrea Fabra Fernández, diputada por Castellón, apenas hay rastro de su actividad en el diario de sesiones. Fue primero senadora y desde el año 2008 tiene su nómina domiciliada en la Carrera de San Jerónimo.

Es una parlamentaria genovesa típica y tópica. Su entrada en las Cámaras del Reino están estrechamente asociadas a su padre, a su abuelo y a su bisabuelo. Todos ellos fueron Presidentes de la Diputación Provincial y que desde que nació allá por el año 1973 han marcado su vida, su trayectoria, valores y educación.

Desde muy joven supo bien lo que es ser hija de un cacique local. Todo eran ventajas y alegrías. Para todo le hacían precio. Es decir, gratis total para asistir en primera fila a todo tipo de eventos deportivos, taurinos, culturales etc que eran financiados por la Institución que su padre cacique tenía a bien sufragar a costa del contribuyente.

De entre todos sus hermanos, Borja , Claudia  y Carlos. su padre cacique la eligió para que cuando tocara tomara el relevo del clan familiar.  Se formó en colegios de pago y a la edad que estaba prevista acabó la carrera de Derecho. Muy joven la afilió su padre cacique a las Nuevas Generaciones Genovesas. Por buscarle le ayudo a buscar novio y marido.

Aquí también funcionó el refrán de que " Dios los cría y el Partido Popular los junta ". Así que dicho y hecho. Andrea contrajo matrimonio y bienes gananciales con un genovés entonces muy prometedor : Juan José Güemes. El futuro era de ellos. El marido pronto ascendió en el escalafón de la mano de su padrino Rodrigo Rato Figaredo. Eran tiempos de vinos, rosas y pelotazos. Un buen día se fijó en su juventud, su desparpajo y en su ausencia de principios, la Sra. Condesa Aguirre. Le hizo una oferta que no pudo rechazar y le nombró Consejero para sucesivas Consejerias.

Por entonces, su novia-esposa, de la mano de su padre cacique, siguió la tradición familiar de hacer negocios al borde de la ley.y también tuvo sus roces habituales con jueces, fiscales y la AEAT. Su condición de aforada, una vez más, le salvó del abismo.

El caso es que Andrea  y marido se instalan en la capital del Reino en una zona exclusiva y excluyente del mundanal ruido. Compran o les compran un espectacular chalet en Pozuelo y ambos se ganan cómodamente la vida en el Senado y Congreso y en el gobierno de la Sra. Condesa. Hacen caja e influencias que se van reflejando en sus sucesivas declaraciones de bienes y rentas que en honor a la verdad, son prometedoramente sospechosas. Y entre tanto glamour tiene tiempo para obtener el correspondiente Máster que todo genovés de postín logra del IESE ( Opus Dei ) sobre Liderazgo y Políticas Públicas

Su padre cacique respira tranquilo y aunque su familia se va al garete y su nueva novia no es lo que esperan sus clónicos hijos, la situación le compensa : Sus sueños dinásticos se van cumpliendo y de rebote como quien no quiere la cosa, se blinda con una aforada a pie de juzgado.

Y así van pasando los años hasta que un buen día, Andrea Fabra Fernández hace honor a su apellido y sin poder evitarlo  grita desde su escaño  lo que sus compañeros piensan y no dicen y ella desde muy pequeña ha aprendido : Que se jodan todos aquellos que no son como ella ni como los suyos. Ese día los elegidos de sus insultos fueron los parados, otras veces, lo han sido los malvados periodistas o los del movimiento del 15M. Andrea se limita a gritar lo que desde la cuna ha visto que hacían sus mayores.

En realidad Andrea es lo que parece y algo más. Si hubiera nacido unos kilómetros más allá, por ejemplo, en un pueblo llamado Corleone en la profunda Sicilia, sus antepasados tendrían una calle con su nombre y ella se desplazaría a Palermo a la prisión regional a llevarle la ropa lavada a su padre cacique. Sin embargo, nacer en España le ha supuesto un escaño y un padre padrone que entra y sale de los juzgados como Pedro por su casa que además, una navidad si y otra también le toca la lotería.

Visto así las cosas Andrea cuando grita " Que se jodán " es igual de sincera que cuando su padre cacique llama hijo de puta al líder de la oposición. De tal palo tal astilla.

3 comentarios:

LA VERDAD dijo...

La DOMINATRIZ Andrea y su "¡que se jodan", es el mayor exponente de lo que piensa el PP sobre el pueblo constreñido y famélico por los recortes y subidas de impuestos que no impone el sádico gobierno.
¡ANDREA, ERES UN ANGEL! de Satanás.

antolina franco dijo...

Que dimita inmediatamente, y se valla a la cola del paro

manifiestadeprimente dijo...

¿Diputada por Castellón y viviendo en Pozuelo (Madrid)? Con sus dietas, naturalmente.

Ahí está, dando ejemplo.